Andadores con asiento

La Seguridad Social en España puede cubrir hasta el 100% del coste de un andador para adultos prescrito por un médico, siempre que se cumplan los requisitos necesarios y se adquiera a través de proveedores autorizados. Sin embargo, el importe específico puede variar según el tipo de andador para mayores y las condiciones del paciente. Es recomendable consultar las tablas de prestaciones de la Seguridad Social para obtener información precisa sobre la financiación en cada caso particular.

Si necesitas más información sobre el proceso de reembolso por la compra de un andador, aquí te explicamos todos los detalles

Los andadores para personas mayores deben considerarse cuando se presentan señales de inseguridad al caminar o problemas de equilibrio. Tomar esta decisión a tiempo puede prevenir caídas y lesiones, lo que resulta esencial para la seguridad de los ancianos. ¿Cuál es el momento exacto en el que tenemos que empezar a usar un andador?

-Tan pronto como sea necesario: Si comienzan a experimentar problemas para caminar con seguridad, es recomendable consultar a un médico o fisioterapeuta.

-Para prevenir caídas: Si una persona mayor tiene un historial de caídas o inseguridades al caminar, es hora de considerar el uso de un andador para evitar accidentes.

Un médico especialista, como un geriatra o fisioterapeuta, es quien receta andadores para personas mayores. Ellos evalúan las necesidades del paciente y determinan qué tipo de andador es adecuado para mejorar su movilidad y seguridad.

La elección entre un andador para personas mayores con ruedas o sin ruedas depende de las necesidades del usuario. Un andador con ruedas es más fácil de manejar y permite mayor movilidad, ideal para quienes tienen un buen equilibrio. En cambio, un andador sin ruedas proporciona más estabilidad y soporte, siendo adecuado para personas mayores con mayor dificultad para caminar. Es importante considerar las capacidades y seguridad del usuario al tomar la decisión.

Saber utilizar el andador para adultos con asiento es sencillo pero importante para asegurar la seguridad y comodidad. Primero, ajusta la altura del andador para que los brazos queden ligeramente flexionados al sujetar las asas. Luego, camina con cuidado asegurándote de mantener una postura erguida, usando las asas para soporte. 

Cuando necesites descansar, simplemente te sientas en el asiento incorporado, y cuando quieras seguir, ajusta la posición y continúa caminando con precaución. Siempre recuerda que es fundamental usar el freno si tiene ruedas y asegurarte de que el área esté libre de obstáculos.

Un andador para adultos con asiento es recomendable porque ofrece un lugar para descansar durante los paseos, ayudando a reducir la fatiga y brindando mayor comodidad y seguridad a las personas mayores durante su desplazamiento.